putas noches de adicción

Nadie se atrevía a entrar allí.Cada pie que posaba sobre ella,chirriaba.La madera era vieja, y se partía cada vez que los pies apoyaban sus talones.Era blanca y tenía una mala fama, pero aferraba a cualquiera que la viese.Excitaba, incluso.Era prohibida y por eso tenía un toque morboso,aunque también era un maldito peligro.Tres pisos y unos cuantos sótanos.Las habitaciones eran todo polvo, era antigua.Y nadie se imagina a los dueños,que ya están bajo tierra.Se incendió en la hoguera de San Juan,con todos dentro,y sus espíritus todavía vagan por allí.Cada 24 de Junio salen para reivindicarse.Hay tantas leyendas sobre esa casa...Y la verdad es que si que da verdadero miedo, más en la noche.Nadie se atrevió nunca partir hacia allí un 24 de Junio.Ni tampoco de noche, supongo.En cada esquina, te observan.En cada lugar de esa casa, te miran.Te analizan.Te matan con la mirada, y tu lo sientes.Yo lo sentía mientras hacía el amor en el puente de aquella casa.Un 24 de Junio, que decidí partir hacia allí.No daré el nombre,ni tampoco os diré en que parte de la casa se me ocurrió hacerlo.Yo sentía las miradas, los mordiscos que me daban los no presentes.El placer que me estaba dando el chico con el que iba, pero no más que las miradas de cada esquina.Y me diréis que estoy loca,pero mataría por volver a hacerlo.