YA NO PEDIRÉ UNA CERVEZA PARA DOS

Me picaban los ojos de tanto releer ese mensaje.Se me había caído la taza de café de las manos e incluso creo que el rimmel que llevaban mis pestañas había desaparecido.No podía creerlo, no podía parar de mirar la pantalla de mi teléfono.Dejé el aparato posado en la mesa de la cocina como si fuese algo poderoso, aunque, en ese momento, preferiría no haberlo tenido.Me quedé sentada.Fría y sin latir.Me quedé quieta, aunque preferiría que la que se quedase quieta fuera mi cabeza en vez de mi cuerpo.No entendía nada.Incluso ni los movimientos del pie izquierdo que hacía cada poco.Decidí apagar el móvil, no leer más eso.No darle más vueltas y cambiar de opinión."Es de cobardes,cortar por mensaje",pensé.Y es que, era la verdad, o eso es lo que opinaba mi mente cada maldito minuto.Todos los recuerdos se volvieron oscuros.Su cara,borrosa.Agarré el móvil y en un arrebato de furia, impotencia quizá, lo lancé a donde más lejos pudiese.Quería romperlo.Romper el teléfono, el mensaje.Romper su recuerdo.Su falso te quiero.Y su presencia que de mi se apoderaba cada día,y sobretodo en ese momento.Mi boca escupió un puñado de insultos sin pensar.Decidí mandarlo todo a la mierda.Borrar todas las caricaturas.Todo lo que me hiciese daño.Agarré la taza de café que se me había caído de las manos hace apenas cinco minutos y la tiré,creía que era una "prueba" de mi enfado.Abrí el armario y cogí otra.Mientras me calentaba otro café, intentaba hacerme una persona nueva,pero eso lo conseguí nada más salir a la calle.Con mi chaqueta bien abrochada y mis zapatos bien apretados, me fui a saborear la lluvia.Ya era una persona nueva.Tú, ya no estabas.Y,lo bien que me sentía,joder.